En la actualidad se están realizando cambios significativos en la forma de trabajar de las organizaciones. Ante esta coyuntura se han dispuesto medidas para evitar el contagio del virus. En consecuencia, las personas ahora  trabajan desde  casa (home office). Sin embargo, algunas personas todavía tienen dudas sobre cómo ser productivos logrando equilibrar el ámbito familiar y profesional.

El teletrabajo es una modalidad de trabajo que permite que el colaborador cumpla sus responsabilidades sin estar en la oficina haciendo el uso de las Tics. Además es importante el trabajo en equipo, una relación entre la empresa y el colaborador para conseguir óptimos resultados.

Existen varios tipos, sin embargo, se mencionará la que más se utiliza: el teletrabajo online o two way line. El teletrabajo online, denominado teletrabajo en tiempo real, es la modalidad más conocida: existe una conexión entre la computadora u ordenador del trabajador y la empresa (Saco, 2007).

El teletrabajo online al ser una interacción bidireccional permite que la supervisión sea continua por parte del empleador. Esto puede tener sus beneficios y también desventajas, sin embargo, si se establecen los lineamientos adecuados la organización y el colaborador saldrán beneficiados.

Entre algunas de los beneficios que más resaltan  para la empresa son: a) Ahorro de desplazamientos y de energía b) Incremento de la productividad, c) Flexibilidad para realizar la contratación de personal, d) Probabilidad de incorporar personas altamente competitivas e) Disminución de los costos laborales.

Y para el colaborador o teletrabajador: a) Probabilidad de trabajar sin descuidar  las obligaciones personales o familiares b)  Autonomía profesional o independencia en su desempeño de laboral, c) Flexibilidad laboral, d)  Altos niveles de responsabilidad, compromiso, autodisciplina, planeación y organización (Saco, 2007; Castillo, 2010).

El teletrabajo es una alternativa de trabajo ante la situación actual y puede mejorar el clima laboral y la productividad de los trabajadores, ya que se pueden manejar mejor los tiempos y conciliar la vida familiar con lo laboral.

La realización del teletrabajo exige el desarrollo de determinadas competencias por parte del colaborador como el uso de las Tics, el uso de desarrollador web, plataformas virtuales, etc. También depende de lo que requiera la organización y el puesto de trabajo, además de las habilidades blandas para conseguir los objetivos esperados.

Se requieren de habilidades blandas porque el trabajador tiene que haber desarrollado autonomía,  planificación y organizado para que la realización de las tareas no cause estrés y ansiedad por estar realizando una actividad que era desconocida. 

Al respecto, Guzmán y Albreo (2017), sostienen que las habilidades que un teletrabajador requiere todavía son objeto de estudio, por lo general, el enfoque está orientado hacia dos campos: la  utilización de las TIC y el incremento de la productividad empresarial.  

También afirma que las organizaciones requieren utilizar nuevas estrategias para favorecer el desarrollo, ser reconocidas en el exterior por su marca, permitiendo que sus utilidades se incrementen. Además, la inclusión de los sectores vulnerados de la población.                     

Se infiere que tanto la formación profesional y personal es vital para que se realice el teletrabajo. Asimismo, todavía hace falta delimitar mejor las competencias técnicas que se requieren.

La adecuada realización del teletrabajo implica un cambio en la cultura de la organización, que se adecuen los procedimientos que antes se realizaban de manera presencial y que los colaboradores también sean parte de ese cambio.

Castillo (2010) recomienda  buenas prácticas en el esquema del teletrabajo o también conocido como home office: a) Políticas internas empresariales (las responsabilidades gerenciales y del teletrabajador), b) Incorporar  el teletrabajo en el reglamento interno de trabajo, c) Elegir  canales de comunicación adecuados con  buena tecnología, d) Capacitar constantemente a los colaboradores acerca de lo que involucra una excelente gestión, e) Hacer partícipe a los colaboradores en todas las actividades institucionales, definiendo los medios y estrategias para lograrlo satisfactoriamente.

Se concluye que por el desconocimiento y la desconfianza  todavía el teletrabajo no se ha diversificado a todos los sectores de las organizaciones. Cabe resaltar que todavía los lineamientos generales para su implementación no están del todo claros, lo cual se evidencia en la literatura científica.

Ante la emergencia sanitaria que se vive en los países, se requiere que se defina mejor cómo puede implementarse adecuadamente esta modalidad de trabajo y aclarar dudas que todavía hay al respecto. Un ejemplo sería el cuidado de la salud del trabajador en el lugar que realiza su trabajo.

Es cierto que los cambios no se dan de un momento a otro, no obstante, al enfrentar esta crisis amerita que evaluemos nuevas formas de poder realizar el trabajo sin ponernos en riesgo y que pueda ayudar a conseguir las metas y objetivos de las organizaciones y que puedan reactivar la economía para el bien de todos.

Referencias: